MI VOZ

Crecemos. Eso es inevitable. Tropezamos y caemos. Y eso, también es inevitable. Aprendemos, aunque no queramos. Repetimos errores porque a veces no queremos escuchar. No queremos escuchar las voces de la gente que nos rodea. Ni tampoco, nuestra voz interior. Por eso, siempre aprendemos aunque no queramos. Y caemos, y joder, cómo duele caerse. Pero nos levantamos y nos lamemos las heridas. Y ya no duelen, pero escuecen.

d28effc290af97ad6865ae5dfb31c520.jpg
Pinterest.

Venimos al mundo desorientados. Aunque pienso que nos desorientamos más con el paso del tiempo y de ahí viene que necesitemos definir nuestra identidad y encontrar nuestro lugar. Nuestra persona, nuestro hogar y nuestros propios sentimientos. Ayer estuve con una amiga y me dijo que no encontraba su lugar. Y yo le respondí que yo tampoco. No encontrábamos personas con las que estar al cien por cien ni con las que nos sintiéramos nosotros mismos. Tampoco estamos a gusto en nuestro entorno. Pienso, ahora hablo por mí, que necesito renovar. Ya sabéis, hacer una limpieza de todo lo vivido. Es necesario. Al igual que hacer limpieza en tu cuarto y tirar todo aquello que no usas. Lo tiras, con pena, pero al final te deshaces de ese objeto feo que está en tu escritorio que no pinta nada ahí. Pues lo mismo pasa cuando necesitas renovarte a ti mismo y romper con todo lo que has vivido hasta ahora. Hacer un paréntesis, ya sea largo o corto, pero hacerlo. Con sus comas, sus puntos y apartes y sus puntos finales.

Nos surgen dudas y preguntas existenciales. Y ya no sólo nuestra cabeza las produce en ese mundo de neuronas conectando unas a otras y realizando conexiones eléctricas, sino que también nos las infunden. Dudas y preguntas tanto propias como ajenas. Y vivimos en un mundo donde mucha gente pierde la voz o nunca la tuvo. En la adolescencia, buscamos nuestra identidad, vamos de un estilo a otro pensando quiénes somos y quiénes queremos ser. Algunos pueden llamarlo inmadurez, otros camino interior. Otros también lo llaman «descubrirse a sí mismo».

Hoy llevas esto y mañana lo contrario. Te formas a lo largo de tu vida adquiriendo conocimientos de muchas cosas que, a la larga, son inservibles –no todo lo que aprendemos en las instituciones de educación te va a servir a desarrollarte como persona. Lo que lo va a hacer va a ser la vida. Vas a ser tú con la vida. Y durante tu vida, o tú con la vida, seleccionas lo que te interesa y te llama la atención. Lo que te apasiona. Y de ahí, vas creando tu estilo, tu imagen, tu ideología, tu personalidad, y lo más importante, tu voz.

7ef52e7e9708188f72e6af4a5f93cd6f.jpg
Pinterest.

Desgraciadamente, hay personas que no la encuentran nunca. Deambulan de aquí a allá. Copiando maneras y apropiándose de ellas. Creando momentos que no sienten del todo y dando una imagen errónea. Crearán recuerdos que, en realidad, no pertenecerán a su corazón.

Sabréis que la personalidad es un pilar fundamental en una persona. Personalidad, inteligencia, fuero interno, ser, carácter, temperamento, estilo… Llámalo como quieras.

Yo lo llamo voz.

076e4074aa989b5d3da320cf5a55d86e.jpg
Pinterest.

Porque la voz, la que tus cuerdas vocales al vibrar hacen posible, es algo único. Es algo tuyo.

Es algo con lo que podrás conquistar, atrapar, enamorar, enrabiar, decepcionar, insultar, gritar, cantar, recordar… Y sólo habrá una manera en la que sepas que eres tú realmente. La forma con la que llevas acabo todas esas acciones a través de las vibraciones de tus cuerdas vocales, que al unirse, dejan tu voz al descubierto. Dejan tu ser. Te dejan a ti desnudo. Con una mano delante y otra detrás. Ya no eres tú con la vida, sino tú ante la vida. Y tienes mil y una forma de hacer y deshacer, de hacer como que no has hecho, de ver y ponerte la venda en los ojos, de tomártela en serio o demasiado en serio. Mil y una forma de encarrilar tu vida.

54dd4777c54d8ea97d5b73745b74fc01.jpg
Pinterest.

Sin embargo, no estoy hablando sólo de la voz que sale del pleno pulmón, sino de una voz metafórica, pero no por ello menos importante ni menos notable. Hablo de aquella que compone tu espíritu.

Buscar tu voz es tan importante como saber que uno más uno, desgraciadamente, no siempre suman dos. Que no todo es blanco o negro. Que a veces, hay gris, pero otras veces hay rosa. 

Pienso que tenemos distintas voces que conforman nuestra mente.

En primer lugar tenemos una voz negativa, aquella que a las tantas de la noche te visita y te despierta para atormentarte un poco sobre fantasmas del pasado que prometieron y, a su vez, desprometieron.

“Toc, toc. Soy yo y vengo a decirte que todo el amor que viviste con aquella persona era una gran mentira. 

¿Has pensado qué vas a hacer el año que viene?

¿Le encuentras sentido a todo lo que estás viviendo?»

Y todos sabemos que a nadie le gusta recordar aquello que hace daño. Esa persona que viene en forma de recuerdo y punza el corazón. Nadie quiere un corazón punzado, pero a veces es necesario que nos puncen para mantenernos vivos. Para apreciar aquello que venga y pueda paliar esos punzamientos. Y cubrirlos con una capa dejándolos como un mero recuerdo. Dicha voz, que es demasiado caprichosa, no se contenta con recordarte el daño que te hicieron y que alguna vez, seguro que hiciste, sino que también intenta darte una visión pésima de tu futuro. Dudas y preguntas. En cambio, la voz positiva nos salva de muchas noches tormentosas y nos ayuda a conciliar el sueño con un:

“Ya nos preocuparemos otro día. Todo va a ir bien”

21ea95edaadffbb09c55fe3d88133ac4.jpg
Pinterest.

Entre ellas, podemos ver la voz profesional. Aquella que saca nuestra competitividad y aquella que nos ofrece lo mejor de ella misma para que todo salga bien a nivel académico, estudiantil y artístico. Yo he pensando en mi voz. Y concretamente, en ésta. Me siento como un adolescente que intenta encontrarse a él mismo. Sin embargo, yo ya me tengo más o menos encontrado, pero creo que mi voz como “escritor” –no es que pueda denominarme escritor, pero es para que me entendáis- está bailando en una cuerda fina sobre el océano. Pienso que conforme pasa el tiempo y adquiero experiencias, y conforme pase el tiempo y adquiera experiencias, mi voz profesional adoptará diferentes formas. Espero que aunque vaya cambiando, pues todo vamos cambiando o transformándonos por sucesos que vivimos, no pierda su esencia. No pierda el escribir con el corazón. Desde dentro hacia fuera.

Últimamente no puedo para de leer libros. No es que no pueda parar, es que no quiero. Estoy leyendo más y más rápido que de costumbre. Estoy formando mi voz profesional, pero a la vez, negativa y positiva. A la voz personal, mental. A la voz del amor y del odio, de la alegría y de la tristeza, de los recuerdos. A todas las voces les llega un poco de todas esas lecturas, de mis experiencias y de lo que escribo. Todas forman un conjunto y todas necesitan de todas para alcanzar el equilibrio.

a57c94055f2ff3ef81bfcaffd870fb44.jpg
Pinterest.

Hoy, mientras escribo esto (no va a ser publicado el mismo día) mi voz negativa me dice muchas cosas, pero la voz profesional está intentando amordazar esa voz mientras expreso mis pensamientos, emociones, quejas, victorias, amores y desamores en letras.

No penséis que por llamarse “voz negativa” debemos rechazarla y marginarla. Esa voz es tan importante como cualquier otra. Esa voz nos hace un alto el fuego cuando nos emocionamos demasiado rápido. Esa voz previene para evitar curar algo que necesitará muchas tiritas emocionales. Sin embargo, a veces debemos curar para saber que todo puede sanar. Que toda flor puede volver a florecer.

12552930_1512886359014026_2220058555307182925_n.jpg
Daniel Sánchez.

Y en esto mi madre es experta manteniendo vivas las plantas de navidad en pleno verano. Y si la planta de navidad es capaz de sobrevivir con cuidados y resurgiendo de su faceta más denigrante en el próximo invierno, las heridas emocionales pueden sanarse. Sean las que sean, con mayor o menor tiempo, con apoyo y perseverancia. Sin perder lo que eres. Sin perder tu voz. Y es que si tu voz es tan verdadera que actúa con el corazón, serás capaz de soportar mejor las tormentas que despertarán los demonios de tu interior para luego ser amansados con tu voz.

Tu voz es única.

Encuéntrala, cuídala y úsala.

996328b236a6538c0a1b7d45b25fd8a6.jpg
Pinterest.

-S.D.


Sígueme en:

https://twitter.com/ElBalDeLasVid2

https://www.facebook.com/elbauldelasvidas2

https://www.instagram.com/elbauldelasvidas

9 Comentarios

  1. Mi voz profesional me dice que sí somos escritores aunque no vivamos de ello. Porque es escritor aquel que plasma sus emociones y las hace revivir en otra persona. Tú lo haces, no dejes que tu voz negativa te diga lo contrario. Quizá la vida nos lleve por otros caminos pero esa voz en concreto siempre estará ahí. Menudo lío de vocrs en un momento. Si es que al final estar con uno mismo no estar solo 🙂 un beso!

    Le gusta a 1 persona

  2. Nada como llevar la voz cantante de tu vida, porque aunque la voz negativa tiene su peso, tampoco hay que darle más del que se merece, créeme. Siendo optimista se llega mucho más lejos.

    ¡Enhorabuena por la bonita reflexión! Como siempre, profunda y sincera, de las que llegan y motivan a seguir.

    ¡Un besazo!

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.